Microsoft acaba de presentar su nueva imagen corporativa. Por primera vez en 25 años, los de Redmond han rediseñado su logo. Aunque la firma había modificado en múltiples ocasiones el branding de su producto estrella, el sistema operativo Windows, no lo había hecho con el de la compañía. Ahora, aprovechando un año en el que la empresa tiene previstos múltiples lanzamientos, han dado el salto al cambio de look.
“Esta oleada de nuevos lanzamientos no es únicamente el reimaginar nuestros productos más populares, también representa una nueva nueva era para Microsoft, por lo que nuestro logo debía evolucionar para destacar visualmente este nuevo comienzo”, explica en el blog oficial de la compañía Jeff Hansen, general manager en estrategia de marca en la compañía. El nuevo logo, asegura, se inspira en los principios de diseño de los productos de la firma “si bien recupera la herencia de nuestros valores de marca, fuentes y colores”. El logo incorpora dos elementos clave: un símbolo con el que quieren evocar todo el portfolio de la firma y su propio nombre.
La compañía empleaba hasta el momento únicamente su nombre en el logo, acompañado por ocasionales frases positivas. En ninguna de sus ediciones anteriores la firma añadía un símbolo para representar sus productos.
El nuevo diseño ha cosechado opiniones variadas. Todos destacan que ha eliminado las reminiscencias ochenteras de la identidad de la firma, pero, como apunta un diseñador a The Seattle Times, “no tiene nada que ofenda, ni tiene nada que emocione”. Una columnista del The Washington Post va mucho más lejos y declara desdeñosa que recuerda a algo que cualquiera podría hacer con Paint.
El logo, según un experto consultado por The Seattle Times, tiene detrás unos seis meses de trabajo y habrá costado entre 250.000 y 500.000 dólares. Microsoft no ha roto con su identidad anterior, ya que el nuevo logo recuerda a la imagen de algunos de sus productos y sobre todo a la identidad de sus tiendas, por lo que el usuario está preparado para aceptarlo.
El plan de introducción del rebranding empezará con la incorporación del logo al site y su colocación en tres de las tiendas de la firma desde el mismo momento en el que fue anunciado. A ello se sumará una campaña de anuncios y la progresiva incorporación del mismo a todos los espacios de Microsoft. Microsoft no es la única firma que ha aprovechado el verano para someterse a un cambio: Twitter y otras firmas también cambiaron su logo recientemente.
Vía: Ticbeat